EUFEMISMOS ABORTISTAS

Dentro de la lluvia fina de conceptos tramposos que están floreciendo como setas al calor del debate sobre la "inminente" necesidad de ampliar la ley del aborto en España hay todo un clásico que, sin lugar a dudas, sigue llevándose la palma. La eufemística nomenclatura de la barbarie infanticida como "interrupción voluntaria del embarazo". Por eso traigo ahora a colación unas sabias palabras del filósofo y pensador, Julián Marías con las que, hace años, se refería a este ejercicio de cinismo por el que las palabras, lejos de ayudarnos a comprender la realidad, contribuyen a confundir y oscurecer el mundo que nos rodea: “A veces se usa una expresión de refinada hipocresía para denominar el aborto provocado: se dice que es la «interrupción del embarazo». Los partidarios de la pena de muerte tienen resueltas sus dificultades. La horca o el garrote pueden llamarse «interrupción de la respiración», y con un par de minutos basta. Cuando se provoca el aborto o se ahorca, se mata a alguien. Y es una hipocresía más considerar que hay diferencia según en qué lugar del camino se encuentre el niño que viene, a qué distancia de semanas o meses del nacimiento va a ser sorprendido por la muerte. (…) es actuar como Hamlet en el drama de Shakespeare, que hiere a Polonio con su espada cuando está oculto detrás de la cortina. Hay quienes no se atreven a herir al niño más que cuando está oculto -se pensaría que protegido- en el seno materno.”