LOS OBISPOS ESPAÑOLES Y LA COPA DEL MUNDO DE FÚTBOL

La Conferencia Episcopal Española, que celebra estos días su XCVI Asamblea Plenaria en la Casa de la Iglesia de Madrid, ha recibido la visita del trofeo que la selección española de fútbol levantó en Sudáfrica tras ganar el Campeonato del Mundo el pasado mes de julio. El presidente de la Federación Española de Fútbol, Angel María Villar, ha rogado al cardenal arzobispo de Madrid y presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE), Antonio María Rouco Varela, que interceda para que puedan cumplir su deseo de llevar la Copa del Mundo al Papa Benedicto XVI, petición que, según ha asegurado Rouco harán llegar al Pontífice y que, a su juicio, tendrá "éxito". Por otro lado, Villar ha pedido al cardenal Rouco que la Conferencia Episcopal rece por ellos para que España gane la candidatura para la celebración de la Copa del Mundo en 2018. Por su parte Rouco ha apuntado que estaría "muy bien" que, al igual que les han pedido a los obispos que recen por ellos, recen ellos mismos también "no sólo cuando hacen la señal de la cruz al entrar al campo" que, por otra parte, ha admitido que les gusta que lo hagan. Interesantes y profundas han sido las palabras sinceras del católico Villar: "La gente del fútbol, en su mayoría, somos católicos. Cuando era jugador del Athletic Club de Bilbao, buscaba al capellán para que celebrara misa los sábados. La Iglesia, durante siglos, se ha preocupado por el bien del hombre. Nuestro país, desde su origen, tiene raíces cristianas y no se entiende sin la fe cristiana. Por estas tres razones estamos aquí. Ustedes han aceptado compartir este trofeo que nos certifica como campeones del mundo. Queremos profundizar más en la relación que representan en el fútbol español. Este trofeo se ha conseguido por valores que ustedes predican: sacrificio, trabajo en equipo, superación, juego limpio… Todo ello, dirigido por Vicente del Bosque, un hombre con serenidad y muy buenas cualidades humanas. El fútbol español es un instrumento maravilloso para la formación equilibrada del ser humano. El fútbol y la fe van unidos. La fe no es un problema para el fútbol”. Por su parte, el entrenador Vicente del Bosque ha asegurado: "Tengo la fortuna de contar con gente trabajadora y discreta, lo que hace más fácil mi trabajo. Somos conscientes de que estamos aquí porque hemos ganado. Tuvimos un camino difícil, soy un afortunado de dirigir este grupo. Hemos dado mucha importancia a las relaciones humanas y he intentado humanizar las relaciones y crear un agradable marco de trabajo. Los jugadores han sido ejemplos a imitar: han unido su talla humana a su calidad de futbolista. En el fútbol profesional también hay que trasladar la buena conducta. Me quedo con la gente que te encuentras por la calle y te dicen “muchas gracias por hacernos tan felices". Los jugadores han tenido un buen estilo en la victoria y sabemos lo difícil que es ganar”.